Sevilla contada: la mancebía
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Description
Sevilla contada es la audioguía que recorre la capital hispalense tal y como era en el siglo XVI. En www.larutadelapeste.com y de la mano de La Peste, la producción original...
show moreLa Peste disponible completa bajo demanda el 12 de enero en Movistar Plus.
AUDIOGUÍA MANCEBÍA
Shhhhh, escucha, aquí, justo aquí, se levantaba uno de los muros que marcaba los límites...
...de La Mancebía…
En el siglo XVI, en el momento en que se desarrolla La Peste, la producción original de Movistar+, el Compás de la Mancebía era el barrio de los de su estilo más nutrido y conocido de toda la Península. Y uno de los más vastos. Se extendía entre la Puerta del Arenal y la de Triana, la muralla y la tapia que la separaba del resto de la ciudad.
El conjunto estaba muy cercano al puerto y sus trajines. Muchos clientes para las prostitutas que trabajaban en sus espacios.
Pero también al río, cuyas aguas a veces, lo inundaban.
Tenía sus puertas, al menos dos. El postigo que comunicaba con El Arenal y otra más, la del Golpe, cada cual con su portero, el guardacoimas o guardapostigo.
Era, en teoría, el único lugar donde se podía ejercer la prostitución. Un supuesto espacio de tolerancia, pero también de segregación, de marginación de aquellas mujeres.
Dentro estaban las casas de mancebía, espacios mínimos, endebles, mal ventilados, la mayoría propiedad del ayuntamiento, de hospitales o de instituciones religiosas, a los que había que pagar las rentas. Hasta el Cabildo de la Catedral llegó a tener propiedades en la zona.
La Mancebía tenía sus propias Ordenanzas y una Comisión Municipal de control, con el objetivo de que las mujeres que ejercían la prostitución no lo hicieran por toda la ciudad.
La Comisión municipal estaba formado por dos caballeros veinticuatro, que eran los concejales de la época, y por un jurado, una especie de policía. La Comisión se reunía para decidir sobre las peticiones de los propietarios de las casas, de los informes de los cirujanos o las solicitudes de los Padres.
¿Y quiénes eran los llamados Padres de la Mancebía? Los administradores de las casas, a quienes las autoridades exigían el pago de rentas y alquileres. También los encargados de que éstas tuvieran la licencia otorgada por el municipio y de que las mujeres que allí ejercían estuviesen sanas.
Habrá, a mediados del siglo XVII, controles sanitarios, rutinarios y burocráticos, realizados por cirujanos contratados por el Ayuntamiento. Hacía falta un juez que otorgara el permiso oficial. Delante de él, la mujer debía probar que había cumplido ya los doce años, que había sido abandonada por su familia, que era huérfana o de padres desconocidos; y que había perdido la virginidad.
Pese a ese control, muchas mujeres se arriesgaban a salir de los confines de la Mancebía y ejercer en zonas más o menos relajadas de vigilancia, desde el Callejón de Agua, junto al Alcázar, hasta las hoyas de Triana.
Los datos históricos aseguran que las rameras solían ganar hasta 5 ducados diarios, pero si eran feas, ajadas y con defectos - las llamadas rabizas - ganaban 60 cuartos. Había tantas que su número sorprendía a cuantos viajeros visitaban Sevilla. Los cronistas manejan cifras que rondan las 3.000 mujeres en toda la ciudad, otros hablan de que serían alrededor de un centenar las que ejercían dentro de La Mancebía.
Hubo muchos intentos de liquidar la mancebía o, al menos de trasladarla. Pero no se pudo lograr hasta entrado el siglo XVIII.
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Author | Movistar Plus+ |
Organization | Movistar+ |
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