Rusia acusó a la Casa Blanca de “echar gasolina al fuego”, luego de que Estados Unidos anunciara el envío de misiles de largo alcance a Ucrania. Moscú advierte que las acciones de Washington podrían ampliar el conflicto. Zelensky asegura que su país pierde entre 60 y 100 soldados al día en la región del Donbás.